Hola Gourmets!
Hoy os traigo un clásico de la gastronomía española: huevos no-rotos con patatas y jamón ibérico. El señor Lucio hizo mundialmente famoso este sencillo plato, pero hoy existen mil versiones tan o más ricas que la suya. Aquí dejo mi aportación y un truco de oro: usar una buenas patatas, unos huevos caseros, y jamón del ibérico (no falla!):
DIFICULTAD: Baja
INGREDIENTES (4 personas):
- 4-5 patatas medianas
- 2 cebollas medianas
- 4 huevos (de gallinas camperas)
- Tiras de jamón ibérico (jamón serrano también vale, pero no está igual de rico)
- Aceite de oliva
- Pimentón de la Vera
- Sal
ELABORACIÓN:
En primer lugar se realiza la "mis en place", es decir la puesta a punto: se corta el jamón en tiras, en virutas o al gusto. Se reserva. Después se pelan, lavan y trocean las patatas. El corte de la patata al gusto, a mi me gusta en palitos de grosor medio, pero también sirve en láminas, en dados o de la forma que se te ocurra. Se sala la patata.Se pelan las dos cebollas y se trocean en juliana.
En aceite virgen bien caliente se fríen las patatas junto con la cebolla, removiendo hasta que estén tiernas. Se retiran y se escurre el exceso de grasa. Seguidamente se emplatan las patatas y cebolla y se incorporan las tiras de jamón ibérico.
A continuación se frien los huevos, previamente atemperados.
El último paso consiste en acabar de emplatar los huevos sobre la cama de patatas, cebollas y jamón ibérico, y espolvorear un pelín de pimentón (de la Vera por supuesto).
En mesa, cada cual rompe el huevo al gusto :)
Bon apetit!
TRUCO 5 ESTRELLAS: Este plato es muy calórico, por ello, un truco muy sencillito para reducir calorías, es hacer las patatas y cebollas al horno (con un poquito de cerveza o sidra para que no se pegue) y los huevos a la plancha ... y sí ... no es lo mismo, pero todo no se puede tener :).